Y seguimos cerro arriba y cerro abajo, caminamos dos días para bajar, subir, volver a bajar y finalmente subir uno de los cañones más profundos del mundo y puta que valió la pena!
Conocimos lugares maravillosos y gente muy acogedora.
Aquí van las fotos.
Aquí cruzando el río Colca, recobrando el aliento (y las rodillas) después de 4 horas de descenso
Nuestro Hostal en San Francisco de Chuccho, por tercera vez casi nos pierden, dan ganas de quedarse mucho tiempo ahí...recomendable
Cachen los cerritos que bajamos y subimos y bajamos y uf, nuevamente subimos
En una vertiente en el camino